Buenas noticias en el horizonte (¿Próximo?)

El blog estaba plagado de telarañas y ratones que campan a sus anchas. Llegó la hora de sacarle brillo con nuevas noticias que  -supongo- serán de vuestro agrado.

  Tengo un relato en el horno que se encuentra, más o menos, al 75% en su elaboración. Raro será que no acabe en un par de meses. El principal escollo que encuentro a la hora de escribir es el de hacerlo con una cierta regularidad, porque al ser autónomo, vivo bajo el implacable fascismo que impone el tono de mi móvil. Trabajo es trabajo, así que en demasiadas ocasiones debo de perder el hilo del relato a favor de atender a mis clientes.

  He vuelto a escribir siguiendo la metodología casera y totalmente improvisada que utilicé cuando alumbré El Último Viaje de los Samuráis, relato que aprovecho para comunicaros que he quitado de su publicación en Amazon porque la quiero reservar para un proyecto mas ambicioso que creo que la historia se merece.

  Por otro lado, tengo en mi poder una de las dos únicas ediciones impresas en papel de El Último Viaje de los Samuráis, gracias a la sorpresa en forma de regalo que recibí por parte de mi querida mujercita, detallazo que nunca llegaré a agradecerla como se merece. Ver tu obra tinta sobre papel, con el aroma nostálgico que han desprendido tantos libros antes entre mis manos, provoca en mi una sensación dificilmente descriptible.

  Una vez desahuciadas las arañas e invitados los ratones a emigrar a mejores madrigueras, me comprometo a continuar informando por el blog como os tenía acostumbrados.

  Muchas gracias a tod@s.